DEBERES EN CASA

Cuando háblanos de niñez nos referimos a aquel ciclo vital, durante la cual se estructuran las bases para el desarrollo cognitivo, emocional y social del ser humano. Es una etapa decisiva en cada progreso del niño, aquí los cuidados y experiencias que se vivan, influyen en todo el ciclo de vida y es que en esta primera fase se asientan las bases para el desarrollo comportamental que predominaran a lo largo de la vida de la persona y en todas las esferas de la edad adulta. 

La familia es la compañía, ejemplo y sostén en el desarrollo de los niños, Puche, Orozco, Orozco, Correa, y Corporación niñez y conocimiento. (2009) refieren que “está demostrado que el mayor desarrollo del cerebro ocurre durante los tres primeros años y depende en gran parte del entorno en que el niño crece, de su nutrición, salud, la protección que recibe y las interacciones humanas que experimenta”, lo anterior ratifica resalta la importancia de las prácticas que implemente la familia, por ello hablar de responsabilidades o de involucrar a los niños en los deberes y tareas del hogar implica crear un medio de aprendizaje y de desarrollo en múltiples aspectos de la vida familiar y social, tales como la solidaridad, el trabajo en equipo y la responsabilidad, adicionalmente promueve la adquisición de múltiples habilidades necesarias para la vida.

Se hace importante entonces que los padres motiven a sus hijos a ayudar en las tareas domésticas. Claro esta es necesario, en primer lugar, escoger actividades acordes a la edad, de tal manera que no sean demasiado complejas y terminen frustrando al niño al no lograr realizarlas, por otra parte el asignar tareas muy sencillas puede hacer que el niño las considere aburridas y tampoco quiera realizarlas.

Es importante que los niños se sientan animados o reforzados ante el cumplimiento de las actividades asignadas, pues cuando los niños perciben que su ayuda es valiosa e importante para la familia tienden a mantenerla e implementarla en diversos contextos, para que estas conductas se generalicen lo más recomendable es iniciar estas normas de comportamiento desde una edad temprana.

Las normas no necesariamente deben ser aburridas más allá de eso pueden convertirse en una  oportunidad tanto para aprovechar su curiosidad como para recibir un poco de ayuda en el hogar. El tip fundamental es incluir un poco de diversión para obtener su participación. 

Escuchar las palabras normas, reglas y limites puede parecer drástico y fuerte cuando hablamos de niños pero en realidad implementarlas en el hogar implica crea personas responsables y cada vez más independientes, ayuda a estrechar los lazos afectivos y hace que el cada minuto se convierta en tiempo de calidad. Así con acompañamiento y un adecuado entrenamiento, que incluye enseñar paso a paso, con información clara y paciencia, los padres obtendrán un apoyo adicional con los quehaceres diarios sino que también lograran que los niños aprendan una serie de conceptos, procedimientos y valores que trascenderán a su adultez.

Referencias

Puche, R., Orozco, M., Orozco, B., Correa, M., y Corporación niñez y conocimiento. (2009). Desarrollo infantil y competencias en la primera infancia. Bogotá: Ministerio de Educación Nacional.

Alarcón, A., Benjumea, C., Coronell, H., Rodríguez, M. (2016) Influencia de la Familia en el Desarrollo de la Primera Infancia

Vigotsky, L. (1978) Influencia de la Familia en el Desarrollo de la Primera Infancia